La Letra del Año en Cuba es una tradición arraigada dentro de la religión afrocubana yoruba, también conocida como santería. Se celebra cada año el 31 de diciembre, y consiste en un ritual donde babalawos (sacerdotes de Ifá) hacen predicciones y recomendaciones para el año que está por comenzar.
La ceremonia de la Letra del Año se lleva a cabo en casas de religión afrocubanas en toda la isla, y es un evento de gran importancia para los practicantes de la santería. Durante la ceremonia, se invocan a los orishas (dioses y deidades de la religión yoruba) para que guíen y protejan a la comunidad en el año que viene.
Los babalawos lanzan caracoles y utilizan el sistema de adivinación de Ifá para determinar cuáles son las recomendaciones y predicciones para el año en curso. Estas revelaciones se plasman en la Letra del Año, que se da a conocer públicamente y se difunde por toda la comunidad de practicantes de la santería en Cuba.
La Letra del Año en Cuba es un importante instrumento de orientación espiritual para los creyentes de la santería, ya que les brinda información sobre cómo enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que se les presentarán en el nuevo año. Además, las recomendaciones de la Letra del Año les sirven de guía para tomar decisiones importantes en distintos aspectos de sus vidas.
Cabe destacar que la Letra del Año en Cuba es una práctica que se ha mantenido viva a lo largo de los años a pesar de las restricciones impuestas por el gobierno cubano. La santería es una parte fundamental de la cultura cubana, y la Letra del Año es una muestra de la riqueza espiritual y tradicional de esta religión afrocubana.
En resumen, la Letra del Año en Cuba es una celebración ancestral que marca el inicio de un nuevo ciclo lleno de promesas y desafíos para los practicantes de la santería en la isla. Es un momento de reflexión, conexión con lo divino y orientación espiritual que guía a la comunidad a lo largo del año venidero.